viernes, 8 de junio de 2012

Los Duelos y Marilyn Monroe


El duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida (pérdida de un empleo, pérdida de un ser querido, pérdida de una relación, etc.)



Osvaldo: ¿Está bien que yo ahora no esté triste, ni sufra? ¿No debería estar de duelo? Me separé hace una semana.
-  No Bettina, quédate tranquila, tu duelo puede no ser ahora.
-  Ah, ¿Pero es raro no?
-  No. ¿Qué sentís?
Alivio.
-  Claro. (se queda callado) Con respecto al duelo,  a la larga llega.

Recuerdo que habían pasado tres meses y yo no estaba  muy bien.

- Bettina: Este es tu duelo.


Esta situación pasó hace mucho tiempo pero lógicamente la recuerdo en la memoria por la gran enseñanza que me dejó. El duelo llega. A todos. No importa cuando ni como, pero llega. Son diferentes y a cada persona lógicamente le pega distinto. Hay personas que no se recuperan más del dolor y hay otras que lo hacen de una manera admirable. Es muy personal y depende mucho de la educación, de las creencias, del empuje, de las experiencias  y de las formas de ser.

Esta semana escuché a muchas personas hablando de separaciones, de divorcios y de duelos, o mejor dicho de “no duelos”, y me sorprendí por eso y además por mis viejas heridas, quise escribir.

Buenas hoy voy a escribir sobre el dolor de lo que ya no está, enfocado más al duelo del amor del hombre y de la mujer y no de la muerte.



…y el Principito dijo:

-Bien…eso es todo.
Vaciló aun un momento; luego se levantó y dio un paso…
No gritó. Cayó suavemente, como cae un árbol en la arena.Ni siquiera hizo ruido.
Y ahora, por cierto, han pasado ya seis años…
Me he consolado un poco porque sé que verdaderamente
Volvió a su planeta, pues al nacer el día no encontré su cuerpo.
Desde entonces, por las noches, me gusta oír las estrellas; son como quinientos millones de
Cascabeles…
                                                ANTONE DE SAINT-EXUPÉRY (El Principito)


EL Duelo es el doloroso proceso normal de elaboración de una pérdida, tendiente a la adaptación y armonización de nuestra situación interna y externa frente a una nueva realidad.
Dicho de manera más fácil elaborar el duelo significa ponerse en contacto con el vacío que ha dejado la perdida de lo que no está, valorar su importancia y traspasar el dolor y la frustración que comporta su ausencia.

El duelo se ha completado cuando somos capaces de recordar lo perdido sintiendo poco o ningún dolor, cuando hemos prendido a vivir sin él, sin ella, sin eso que ya no está. Cuando dejamos de vivir en el pasado y podemos invertir de nuevo nuestra energía en nuestro presente y en los que están vivos alrededor.

Existe también la posibilidad de que uno no sufra cuando se separa porque muchas personas hacen el duelo estando en pareja, entonces cuando se separan, lo que sienten es alivio.
Lloraron mientras estaban en pareja, en cada situación, en cada momento quizás de alguna manera ya se estaba muriendo.

Esto de sentir que el otro no está, es horrible. Quizás fue un novio, un flaco más, o quizás ni llegaste  a conocerlo bien.

-          ¿Que sentís?
-          Vacío
-          ¿Y que más?
-          No se, lo extraño, pero no puedo llamarlo, ¿que hago?
-          Nada. Pensá en cosas lindas y dejá, que el tiempo en verdad cura las heridas.
-          Bueh…
-          ¿Te digo la verdad? Dejá que duela y llorá, tenés que pasar por esto. No lo esquives. Llora porque no lo tenés al lado y porque no sucedió lo que deseabas. Así que está bien que llores.         (Lagrimas)
      Estoy tan cansada. Tan angustiada.
-          Ya va a pasar

Somos responsables de nuestros actos.


Se me viene a la mente el cuento de los sentimientos en la isla, y como al final mientras el amor se hundía, el único sentimiento que lo ayuda era el del tiempo. La soberbia, la tristeza, la amargura, el rencor y el odio, le daban la espalda. El Tiempo es el que te salva.

Cuando era chica creía que el único duelo era el de la muerte de una persona querida. Pero no. Luego con el tiempo aprendí que cuando te rompen el corazón haces un duelo, cuando el amor no es correspondido haces un duelo, cuando te separas, te divorcias, cuando a alguien no lo ves más, siempre está el duelo por el otro que ya no tenés.

Pensé seriamente en las sensaciones que te deja el amor no correspondido, creo que es el peor amor.
 ¿Que difícil no? Quien no vivió eso alguna vez?

Lo bueno de todo y lo reconfortante es que sabés que no es eterno y que una y otra vez te enamorás y te recuperás. Si lo deseas, lógicamente.
Es como que algo en vos sabe que no es dicho de manera risoria “La muerte de nadie”. Aunque sí sentís que se murió de alguna manera alguien, y aunque lo comprendas de todas formas duele que no estés al lado mío. Ojalá en algún momento ya no duela.

DEL LIBRO DEL GORDO BUCAY COPIÉ LO SIGUIENTE

Recomendaciones para recorrer el camino de las lágrimas y sobrevivir:

Los Diez SI

1-       Permiso: De sentirte mal, necesitado, vulnerable.

2-       Confianza: En vos mismo. Ser positivo.

3-       Nuevos Ojos, Nuevas Puertas: “ Cuando una puerta se cierra otra se nos abre”

4-       Aceptación: Esta es tu nueva realidad

5-       Conexión con la vida. Soltar el pasado

6-       Gratitud: (Familiares, amigos)

7-       Las 3 D: Descanso-Disfrute y Diversión

8-       Aprendizaje. Hacer el duelo significa también aprender a vivir sin algo, sin alguien de otra forma.

9-       Definiciones: Tener una definición sobre la idea de muerte. Reencarnación, si te vas al cielo o al infierno, aconseja tener una postura tomada con respecto a esto. Le preguntaron a Woody Allen una vez si él creía que había vida después de la muerte.  Allen contestó que no sabia, que estaba muy ocupado tratando de saber si podía vivir un poco antes de morir.

10-   Compartir lo Aprendido. ( Bet hace el punto 10) Jajaja.

Los Diez NO
                                                                                                                           
1-  Esconderse: Nunca cierres tu corazón al dolor. Registrá y expresá las emociones que surjan, no    las reprimas.

2-   Descuido: cuida tu salud, tu cuerpo.

3-  No te apures: recorrer el camino lleva tiempo.

4-  No olvidar la Fe: No entiendo a que se refirió Bucay con esto. Supongo que esta bien recurrir a Dios.

5- Autoexigencia: No te maltrates. Aunque las emociones que estás viviendo sean muy intensas y displacenteras, es importante no olvidar que son siempre pasajeras. Sé paciente. No te apures. Tus tiempos son tuyos, recordá que el peor enemigo en el duelo es no quererse.

6-   El miedo de Volverse Loco: Tranquilo No tenes que sentirte fuerte.

7-   No perder la paciencia

8-   Autosuficiencia: No dejes de pedir ayuda. Los necesitas.

9-   No tomes decisiones importantes.

10- El olvido: No intentes olvidar lo que pasó. Al contrario, recordalo. Sin morbosidad pero también sin escapismos.

“El proceso de Duelo permite buscar para tu ser querido el lugar que merece entre los deseos de tu corazón. Es poder pensar en él, y no sentir ya ese latigazo de dolor. Es recordarlo con ternura y sentir que el tiempo que compartiste con el o ella fue un gran regalo. Y esto es cierto para todas las pérdidas. La elaboración permite darle un sentido a todo lo que viviste hasta acá con lo ausente.
En cierto modo nunca, nunca volverás a estar como antes de una perdida significativa, porque ésta inevitablemente te cambia, pero podés elegir si ese cambio SERA PARA MEJOR”

Antes de los duelos están las separaciones.

¿Para que me quedo?
Estoy Esperando que cambies

“Me quedo para cambiarte”
“Para conseguir que seas diferente”
“Para lograr que quieras exactamente eso que yo quiero”

Y todo esto por qué? Porque no soporto la idea de perderte. Para no perderte, te voy a cambiar. Lo cual significa que primero voy a martirizarte y martirizarme aunque en la practica después, de todas maneras, termine perdiéndote.

El miedo a soltar no está relacionado con el amor, está relacionado con la inseguridad.

Yo tuve distintos duelos, pero es cierto que hay ciertas situaciones, que yo llamo como “Me tocaste la herida”, eso supongo que sucede hasta que en algún momento no sucede más.
Con tiempo y mucho amor, a la larga, logras enfocarte en la valoración de vos mismo.
Con respecto a las pérdidas mi mamá me dijo: “Creo que la pérdida más grande es la de un hijo”. Es su opinión. La mía, es que las pérdidas son horribles, pero que muchas veces son necesarias, en algún punto es bueno que dos personas se pierdan si no se hacen bien.  Como escribí la vez pasada  “a veces no obtener aquello que querés, es un maravilloso golpe de  suerte”.

Lo mismo que quedarte en relaciones que no te hacen feliz, son la mayoría de las veces mucho más dolorosas que animarse a soltar.

Pasemos en Limpio

-          Si no va más, no va más.
-          A veces no soltar, es la muerte. A veces soltar implica dejar aquello que en algún momento nos salvó.
-          Esta bien que extrañes.
-          Si no te ve, Aléjate, el o ella se lo pierde.
-          No es amor. Es otra cosa, pero no lo llames amor.
-          Cuida tu corazón y tu alma.
-         Y lo más importante : “Valórate a vos mismo por sobre todas las cosas”, por una simple razón: podés perder millones de cosas, personas, situaciones, relaciones, etc.

                                        PERO NO PODES PERDERTE A VOS MISMO.

DEJO UN CUENTO HERMOSO DEL GORDO BUSCAY.  Yo lo quiero. Si es fraude o no, me importa muy poco. A mi me gusta.

Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe, bastante tonto. ¿Cómo puedo mejorar? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?
El maestro sin mirarlo le dijo:
-Cuanto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mi propio problema. Quizás después... – y haciendo una larga pausa agregó- si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este tema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.
-E...encantado, maestro –titubeó el joven, pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus necesidades postergadas.
Bet
-Bien – asintió el maestro. Se quitó el anillo que llevaba en el dedo pequeño de la mano izquierda y dándoselo al muchacho agregó – toma el caballo que está allí afuera y cabalga hasta el mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda.

Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Vete antes y regresa con esa moneda lo más rápido que puedas.
El joven tomó el anillo y partió.
Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes.
Estos lo miraban con algún interés hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo.
Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y solo un viejito fue tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo.

En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro y rechazó la oferta.
Después de ofrecer su joya a toda persona que pasaba por el mercado – más de cien personas – y abatido por su fracaso, montó su caballo y regreso.
Cuanto hubiera deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro! Podría entonces habérsela entregado al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y ayuda.
Entró en la habitación.
-         Maestro – dijo – lo siento, no es posible conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera conseguir dos o tres monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del anillo.
- Qué importante lo que dijiste, joven amigo – contestó sonriente el maestro – debemos saber primero el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor que él para saberlo? Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuanto te da por él. Pero no importa lo que ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con mi anillo.
El joven volvió a cabalgar.
El joyero examinó el anillo a la luz del candil, lo miró con su lupa, lo pesó y luego dijo:
- Dile al maestro muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más de 58 monedas de oro por su anillo.
- ¡¿¿58 monedas??! – exclamó el joven.
-sí – replicó el joyero – yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero no sé... Si la venta es urgente...
El joven corrió emocionado a casa del maestro a contarle lo sucedido.
- Siéntate – dijo el maestro después de escucharlo - . Tú eres como este anillo: una joya valiosa y única. Y como tal, solo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿qué haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?
Y diciendo esto volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño de su mano izquierda.

Y yo me digo y les digo nuevamente ¿Que haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?


Dedicado a Marylin Monreu, que quizás debido a la soledad, la belleza, el miedo, la inseguridad, las pérdidas, no pudo disfrutar de lo que logró. Quizás si se hubiera valorado más su ser, sus pensamientos, y ella misma se hubiera valorado más, quizás hubiera sido una mina más feliz.

Esperando que el dolor se vaya

 BET




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